Watchman Nee Libro Book cap.14 Libro de lecciones nivel 6: La biblia

Watchman Nee Libro Book cap.14 Libro de lecciones nivel 6: La biblia

LOS LIBROS DE PROFECÍA 1 LOS PROFETAS MAYORES: DE ISAÍAS A DANIEL

Lección catorce

LOS LIBROS DE PROFECÍA (1) LOS PROFETAS MAYORES: DE ISAÍAS A DANIEL

Lectura bíblica

Is. 1:1-2; 4:2; 7:14; 11:1-10; Jer. 9:23-24; 15:15; 17:9; 23:5; 25:11; Lm. 1:1-3; 2:1; 3:22-26; 4:1-2; 5:19-21; Ez. 3:26-27; 18:30-32; 36:22-27; Dn. 1:8; 2:16-21; 3:16-18; 6:19-23; 12:13

Bosquejo

  1. Isaías:
    1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo.
    2. El tema.
    3. El contexto.
    4. El pensamiento central.
    5. El esquema general.
    6. Las secciones.
  2. Jeremías (A—F).
  3. Lamentaciones (A—F).
  4. Ezequiel (A—F).
  5. Daniel (A—F).

Texto

I. ISAÍAS

  1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo: El libro de Isaías lleva el nombre de su autor. Todos los demás libros de los profetas también llevan el nombre de sus autores. [El nombre Isaías significa “Jehová salva”. Isaías, hijo de Amoz (Is. 1:1), fue contemporáneo de Amós y Oseas, profetas del reino de Israel, y de Miqueas, profeta del reino de Judá. Su ministerio profético duró más tiempo que el de los demás; él profetizó durante los reinados de cuatro reyes: Uzías, Jotam, Acaz y Ezequías (1:1). Su esposa fue profetiza (8:3), y tuvo por lo menos dos hijos, Sear-jasub (que significa “un remanente volverá”) y Maher-salal-hasbaz (que significa “el despojo se apresura, o la presa se precipita”) (7:3; 8:3). Isaías fue un historiador (2 Cr. 6:22; 32:32). Según se divulgó entre los judíos, y en algunos escritos rabinos del segundo siglo, él sufrió el martirio al ser aserrado durante el reinado de Manasés (2 R. 21:16; 24:4; cfr. Hch. 7:52). Hebreos 2:13b muestra que Isaías y los hijos que Dios le dio (Is. 8:18) tipifican a Cristo y los creyentes que Dios le dio.]

El libro de Isaías fue escrito en Jerusalén, y se extiende aproximadamente desde el año 760 a. C. hasta el año 698 a. C.

  1. El tema: [La salvación que Jehová efectúa por medio del Cristo encarnado, crucificado, resucitado, ascendido y que regresa.]
  2. El contexto: Israel, el pueblo de Dios, se rebeló contra Dios. No conocieron a Jehová y se llenaron de iniquidades y corrupción. Jehová tuvo que disciplinar a Su pueblo. Primeramente, envió a profetizarles acerca de Su castigo y, luego, empleó a diversas naciones para que los castigaran. Sin embargo, las naciones se excedieron en llevar a cabo las intenciones de Dios; así que, Él también profetizó acerca del juicio que vendría sobre las naciones. Luego, reveló Su deseo: que Su disciplina sobre Israel y Su juicio sobre las naciones introduciría al Dios-hombre, Cristo, y redundaría en la restauración de la nación de Israel.
  3. El pensamiento central: [Cristo es el Dios que se encarna en la humanidad para ser el Salvador del hombre, a fin de que todo el universo que Él creó, el cual está caído, sea restaurado y llegue a su consumación en el cielo nuevo y la tierra nueva por la eternidad.]
  4. El esquema general: [La disciplina que Dios ejerce en amor para con Su amado Israel y Su justo juicio sobre las naciones, introducen a Cristo el Salvador (43:3; 49:26) —quien es Dios (9:6) encarnado para ser un hombre (7:14), que posee ambas naturalezas, la humana y la divina (4:2), vive en esta tierra (53:2-3; 42:1-4), es crucificado (53:7-10a, 12), es resucitado (53:10b-11), asciende (52:13) y regresa (40:10; 64:1)— para satisfacer la necesidad de los escogidos de Dios y de las naciones (9:1-7; 49:6), en la salvación todo-inclusiva que Dios efectúa (12:2-3), a fin de traer la restauración de todas las cosas (2:2-5; 11:6-9; 35:1-10; 30:26), la cual tendrá su consumación en el cielo nuevo y la tierra nueva por la eternidad (65:17). Así que, el contenido de Isaías abarca toda la economía neotestamentaria de Dios, desde la encarnación hasta el cielo nuevo y la tierra nueva, visto en el contexto del Antiguo Testamento de cómo Dios disciplinó a Israel y juzgó a las naciones.
  5. Las secciones: 1) La salvación que Jehová brinda a Su pueblo amado y a las naciones (caps. 1—12); 2) el juicio de Jehová sobre las naciones (caps. 13—23); 3) el resultado de la disciplina que Jehová ejerce sobre Su amado Israel (caps. 24—35); 4) un ejemplo de lo que es buscar a Jehová y confiar en Él (caps. 36—39); y 5) el Siervo de Jehová y la salvación que Él efectúa (caps. 40—66).

II. JEREMÍAS

  1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo: [Jeremías, hijo de Hilcías, sacerdote, nació en Anatot (Jer. 1:1). Nació como sacerdote y fue llamado a ser profeta en el año trece del rey Josías. Habló por el Señor hasta la cautividad de Israel (Jer. 1:2-3, 5-7). De entre todos los profetas, fue el que más persecución sufrió. A excepción de unos pocos reyes, líderes, sacerdotes y algunas otras personas, todos estaban en contra de él y lo aborrecían. Los falsos profetas, quienes afirmaban hablar en nombre de Dios, mintieron y contradijeron sus profecías. Finalmente, Azarías, Johanán y los que estaban cerca de Egipto lo obligaron a irse a Egipto (Jer. 43:2-7).]

La mayor parte del libro fue escrito en Judá. Los últimos capítulos fueron escritos en Egipto. Se extiende desde el año 629 a. C. hasta el año 588 a. C.

  1. El tema: la salvación que Jehová efectúa por medio de Cristo, el Renuevo justo, administrada según un nuevo pacto.
  2. El contexto: Los reyes y el pueblo de Israel habían cometido pecados y estaban llenos de maldad; adoraban ídolos, rechazaban la palabra de Dios y llevaban una vida extremadamente desenfrenada. Jeremías profetizó que tenían que arrepentirse y volverse a Jehová; de lo contrario, serían llevados cautivos y su nación sería destruida.
  3. El pensamiento central: El juicio de Jehová sobre el pecado es concreto. Su amor y fidelidad también son concretos y eternos. Los que se descarriaron debían arrepentirse y regresar a Su regazo.
  4. El esquema general: Jehová reprendió a los reyes y al pueblo por sus pecados. Ellos habían dejado a Dios y habían desobedecido Su Palabra (2:13; 9:13). Adoraban ídolos y cometían fornicación (1:16; 11:13). Hablaban mentira, engañaban y cometían iniquidades (9:13, 5; 11:10). Los reyes esparcieron al pueblo de Dios y no cuidaron de ellos. [Jeremías, por un lado, reprendió a los reyes y al pueblo por sus pecados, y les exhortó a que se arrepintieran; por otro lado, les advirtió que serían llevados a la cautividad, que su nación sería destruida y que las ciudades de Judá y Jerusalén serían desoladas.]
  5. Las secciones: 1) El llamado y la comisión del profeta (cap. 1); 2) el profeta en Judá antes de la caída de Jerusalén (caps. 2—38); 3) la caída de Jerusalén (cap. 39); 4) el profeta en Judá después de la cautividad (caps. 40—43:7); 5) el profeta en Egipto (caps. 43:8—51); y 6) la conclusión (cap. 52).

III. LAMENTACIONES

  1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo: Jeremías también es el autor de Lamentaciones. Este libro una vez fue parte del libro de Jeremías, y en un tiempo se le llamó “El segundo libro de Jeremías”. Según la tradición judía y los traductores de la Septuaginta, el libro de Lamentaciones fue escrito por el profeta después de la destrucción final de Jerusalén, la cual fue llevada a cabo por Nabucodonosor. Esto significaría que el libro fue escrito cerca del año 588 a. C.

Este libro probablemente fue escrito en Jerusalén. Fuera de la ciudad, mirando al Gólgota (también llamado Calvario), hay una cueva escondida llamada la cueva de Jeremías. Se dice que el profeta se sentaba allí para lamentarse por aquella ciudad desolada, y que fue allí que él escribió las lamentaciones narradas en este libro.

  1. El tema: El pecado del pueblo provoca el justo juicio de Dios, pero cuando el pueblo se arrepiente de su pecado, Dios, por Su misericordia, los salva y los restaura.
  2. El contexto: [Jerusalén cayó y el pueblo fue llevado cautivo. Todas las advertencias de Jeremías se cumplieron. Pero, debido a que Jeremías amaba a Dios y al pueblo de Dios, él no pudo soportar ver la caída de Israel y la pérdida de la gloria de Dios a causa de la degradación del pueblo de Israel. Por tanto, él escribió Lamentaciones y lloró por ellos.]
  3. El pensamiento central: el sufrimiento y las calamidades producidas por el pecado, y la misericordia y la compasión que tenía Jehová hacia Sus hijos aun cuando estaba disgustado con ellos.
  4. El esquema general: [Lamentaciones, que consta de cinco capítulos que son cinco canciones, puede ser dividido en cinco secciones: el sufrimiento, la lamentación, la esperanza, la confesión y la oración. A excepción de la quinta canción, cada una de las canciones habla primeramente de la trágica destrucción de Jerusalén y luego de la justicia del severo juicio de Dios. “¡Cómo ha quedado sola la ciudad populosa! La grande entre las naciones se ha vuelto como viuda. La señora de provincias ha sido hecha tributaria” (1:1). “¡Cómo oscureció el Señor en Su furor a la hija de Sion! Derribó del cielo a la tierra la hermosura de Israel” (2:1). “Jehová es justo; yo contra Su palabra me rebelé” (1:18). “Mis ojos desfallecieron de lágrimas, se conmovieron mis entrañas, mi hígado se derramó por tierra a causa del quebrantamiento de la hija de mi pueblo” (2:11). “Vuélvenos, oh Jehová, a Ti, y nos volveremos; renueva nuestros días como al principio” (5:21).]
  5. Las secciones: 1) El sufrimiento (cap. 1); 2) la lamentación (cap. 2); 3) la esperanza (cap. 3); la confesión (cap. 4); y 5) la oración (cap. 5).

IV. EZEQUIEL

  1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo: Ezequiel, hijo de Buzi, era sacerdote (Ez. 1:3). Su nombre significa “Dios fortalece” o “Dios es la fortaleza”. Su obra profética se llevó a cabo en Babilonia, del año 595 a. C. al año 574 a. C.
  2. El tema: el recobro espiritual del pueblo de Dios al ser avivados en su espíritu para ser edificados como plena expresión de Dios.
  3. El contexto: El pueblo de Dios fue juzgado debido a sus pecados y fue llevado cautivo, pero Dios los siguió amando y tuvo misericordia de ellos. Él quería recobrarlos y hacerlos volver para que reedificaran el templo y la ciudad santa, Jerusalén. [Ezequiel reprendió severamente a los líderes y al pueblo de Israel por alejarse de Dios, adorar ídolos, cometer fornicaciones y hacer toda clase de maldad. Él transmitió la palabra de Dios a los hijos de Israel que estaban en cautiverio (Ez. 3:10-11); continuó y confirmó lo que había hablado Jeremías (Jer. 29:1-14), advirtiéndoles que antes de que pudieran regresar a Jerusalén, debían volverse a Jehová su Dios. A pesar de que fue muy difícil al principio y aunque encontró gran oposición (Ez. 3:7-9), el pueblo que estaba cautivo finalmente detestó los ídolos, volvió su corazón a Dios y regresó a su tierra después de setenta años. Esto fue, casi en su totalidad, resultado de la obra del profeta Ezequiel.]
  4. El pensamiento central: Dios es justo con Su pueblo; Él no tolera el pecado y tiene que juzgar a los pecadores. No obstante, Dios también está lleno de compasión para con ellos, y espera que se arrepientan y se vuelvan a Él para recibirlos y derramar Su gracia sobre ellos.
  5. El esquema general: En la tierra de cautividad, Ezequiel recibió las visiones relacionadas con el recobro espiritual del pueblo de Dios, representado por el viento, la nube, el fuego y el electro (cap. 1). Dios aviva a Su pueblo y le da un corazón nuevo y un espíritu nuevo (cap. 36). El pueblo de Dios, como los huesos secos, es avivado y conformado como el ejército de Dios (cap. 37). Luego, Ezequiel revela la reconstrucción de la ciudad santa y del templo santo (caps. 40—48). [Hay cuarenta y ocho capítulos en Ezequiel. Al final, Dios obtiene un templo santo y una ciudad santa en la tierra santa. El templo santo es donde experimentamos la presencia de Dios, tenemos comunión con Él y le servimos, mientras que la ciudad santa sirve para el reino, la administración y el gobierno de Dios. La edificación de la ciudad santa y del templo santo es el resultado del disfrute que el pueblo de Dios tiene de Él y del vivir que ellos llevan en la tierra santa. Cuando el pueblo de Dios disfruta abundante y plenamente a Dios, Él obtiene de ellos una expresión en plenitud, la casa de Dios y la ciudad de Dios. Aquí, Dios puede tener comunión con el hombre y reinar por medio de éste; el hombre puede disfrutar a Dios, y Dios puede disfrutar al hombre. El hombre puede ser completamente lleno de Dios y así expresar a Dios.]
  6. Las secciones: 1) La manifestación de la gloria de Jehová (caps. 1—3); 2) la salida de la gloria de Jehová (caps. 4—24); 3) la gloria de Jehová manifestada al juzgar a las naciones (caps. 25—32); y 4) el regreso de la gloria de Jehová (caps. 33—48).

V. DANIEL

  1. El autor o los autores, el lugar y el tiempo: Daniel era de los hijos de Judá (Dn. 1:6). Su nombre significa “Dios es el Juez” o “mi Dios es el Juez”. Este libro abarca aproximadamente setenta y tres años, desde 607 a. C. hasta 534 a. C.
  2. El tema: El juicio y la destrucción sobre Satanás y los reinos del mundo introducen a Cristo y el reino de Dios.
  3. El contexto: [En el tercer año del reinado de Joacim rey de Judá, Nabucodonosor rey de Babilonia vino a Jerusalén y se llevó a Daniel y a sus tres amigos (1:1-6). Ellos fueron escogidos para ser instruidos en el palacio y ser preparados con miras a servir al rey, pues eran personas aprobadas, diestras en toda sabiduría y dotados en el conocimiento y el entendimiento de la ciencia.

Pero Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la carne del rey, ni con el vino que él bebía; así que, solicitó del príncipe de los eunucos que se le permitiera no contaminarse. Daniel pidió que fueran probados por diez días, de modo que se les diera solamente vegetales para comer y agua para beber y que luego se comparara su aspecto con el de los demás. Al final de los diez días, su apariencia era mejor y más robusta que la de los demás. Así que, el príncipe de los eunucos les permitió comer vegetales y beber agua solamente (1:8-16).

En aquel entonces, el pueblo de Dios fue llevado cautivo, la casa de Dios fue destruida y los vasos de la casa de Dios fueron llevados a la casa de los dioses falsos (1:2; 2 Cr. 36:7). El señorío y la gloria de Dios en la tierra habían desaparecido por completo. El pueblo se hallaba bajo el gobierno del rey de Babilonia y estaba asociado con demonios, pues incluso la comida que comía y el vino que bebía, por ser ofrecidos a los demonios, estaban contaminados y eran inmundos. En un momento como ese, Dios ganó a Daniel y a sus tres amigos, a quienes les importaba el señorío y la gloria de Dios. Ellos resolvieron abstenerse de comer la comida real y de beber el vino real a fin de no contaminarse. De este modo, ellos fueron los vencedores en la cautividad.]

Puesto que Daniel era tal persona, él pudo orar por la ciudad santa y el templo santo de Dios, hasta que estos fueron recobrados. Él fue un hombre de Dios que cambió la era de la cautividad al recobro. También fue capaz de interpretar sueños y ver visiones. Todos los jóvenes deben tomar a Daniel y a sus tres amigos como ejemplos.

  1. El pensamiento central: El Dios Altísimo es el Soberano del cielo y de la tierra y es el Juez supremo. “Que conozcas que el Altísimo tiene dominio en el reino de los hombres” (Dn. 4:25). Por tanto, Él es Aquel que gobierna sobre cuantas naciones gentiles se levanten y caigan; Él es quien da el reino a quien quiere (4:17). Él dispone la posición y la obra de sus fieles siervos; Él les da dones sobresalientes y sabiduría; y al final, Él es quien los protege y les da paz durante tiempos de aflicción y persecución.

Dios juzgó la rebelión de Judá, la soberbia de Nabucodonosor y la blasfemia de Belsasar. Él también juzgará a Satanás, a sus siervos y a las naciones. Finalmente, es Él quien introducirá el reino de Dios para reemplazar todos los reinos del mundo. ¡Aleluya!

  1. El esquema general: El capítulo uno presenta una introducción y la historia de Daniel y sus tres amigos. El capítulo dos nos da la clave de todo el libro: el sueño que Nabucodonosor tiene de la gran imagen. Daniel interpretó que dicha imagen es la profecía acerca de las naciones: Babilonia, Medo-Persia, Grecia y el Imperio Romano; este último, el Imperio Romano, se dividió en dos partes y será diez naciones en el futuro. El reino de Dios descenderá del cielo, desmenuzará los reinos del mundo y llenará toda la tierra. Los capítulos tres y cuatro dicen que Nabucodonosor era soberbio y que fue juzgado. El capítulo cinco dice que su hijo, el rey Belsasar, blasfemó contra Dios y, por tanto, fue castigado. Belsasar murió y su reino pasó a los medas y a los persas. El capítulo seis dice que Daniel desafió el decreto del rey Darío y continuó adorando a Dios en oración. Daniel fue echado al foso de los leones, pero Dios lo salvó de la boca de los leones. Los capítulos del siete al doce hablan de las visiones que vio Daniel: las cuatro bestias, los diez cuernos, el cuerno pequeño, el Anciano de Días, el Hijo del Hombre, el carnero, el macho cabrío, el gran cuerno, los cuatro cuernos notables, el cuerno pequeño, las setenta semanas y otras cosas.

[Daniel predijo que se le quitaría la vida a Cristo cuatrocientos ochenta y tres años (o sea, sesenta y nueve semanas) después de que saliera el decreto para reedificar Jerusalén (9:25-26); que Él recibiría el reino y regresaría (7:13-14); y que a Su regreso, Él sería como una piedra cortada no con mano, que llegaría a ser un gran monte (el reino) y que llenaría toda la tierra (2:34-35). También profetizó que en la resurrección futura, algunos recibirán vida eterna y otros recibirán castigo eterno (12:2; Jn. 5:28-29); los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, resplandecerán como las estrellas a perpetua eternidad (Dn. 12:2-3; Mt. 13:43).]

Después que Daniel terminó fielmente su obra, se le pidió que descansara y esperará la resurrección, el arrebatamiento y la recompensa. Todos nosotros debemos ser como Daniel, a fin de que recibamos la misma recompensa.

  1. Las secciones: 1) La historia acerca de Daniel, Nabucodonosor, Belsasar y Darío (caps. 1—6); y 2) las profecías acerca de las visiones que vio Daniel (caps. 7—12).

Preguntas y ejercicios

  1. Discuta con sus compañeros el contexto, las advertencias y las promesas de cada libro en esta lección.
  2. ¿Qué nos dice cada libro acerca de Dios y de nosotros?
  3. Recite a sus compañeros el tema de cada libro.
  4. A manera de ensayo y tomando turnos, den una presentación de cada libro.
  5. Compare y contraste a Isaías y Jeremías, y a Ezequiel y Daniel. ¿En qué orden se escribieron?

Pasajes citados

  1. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 2 (Lee/LSM), pág. 28.
  2. Life-study of Isaiah [Estudio-vida de Isaías] (Lee/LSM), págs. 2, 3.
  3. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 1 (Lee/LSM), págs. 163, 165-167.
  4. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 2 (Lee/LSM), pág. 31.
  5. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 1 (Lee/LSM), págs. 173, 167-168.
  6. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 2 (Lee/LSM), pág. 31-32.

Referencias adicionales

  1. On Knowing the Bible [En cuanto a conocer la Biblia] (Lee/LSM), pág. 31.
  2. Life-study of Isaiah [Estudio-vida de Isaias] (Lee/LSM), mensaje 1.
  3. Visions of Ezekiel [Las visiones de Ezequiel] (Lee/LSM), prefacio, cap. 1.
  4. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 1 (Lee/LSM), págs. 163-174.
  5. Lecciones de la verdad, nivel 1, tomo 2 (Lee/LSM), págs. 28-32, 44-47.
  6. Pláticas con los jóvenes, (Lee/LSM), cap. 1.
  7. Crucial Points of the Biblia [Puntos cruciales de la Biblia], tomo 2, en chino (Nee/Librería Evangélica de Taiwan), págs. 241-313.