Hoy nos adentramos en lo que sería él primero de los mandamientos para él matrimonio: Único
Tan simple cómo la palabra Único, y tan poderoso como único. Este primer mandamiento se encuentra en Éxodo 20:3:
‘No tendrás dioses ajenos delante de mí. ‘ RV 60
Te pregunto: ¿Que crees que está diciendo Dios en esta ordenanza? Se advierte que Dios quiere mantener una relación exclusiva con tigo, conmigo. Él quiere ser tu único y solo soberano Dios.
¡Me parece genial aplicar esto para él matrimonio! Es crucial mantener una relación única con nuestro cónyuge. Clave vital para un matrimonio saludable que permanecen. Aunque para la sociedad actual, esta idea sea sacada de las mismas entrañas del pasado, anticuada, en desuso, pacata. Da igual cómo lo quieran calificar, basta solo con echar un vistazo a los resultados de quienes sostienen estas banderas falsas de liberalidad, y notaremos un común denominador, solo es él placer las inapropiadas expectativas que llevan a sus habitaciones, una sed que no se sacia, que solo busca satisfacer sus deseos más oscuros y egoístas pervirtiendo la santidad de la unión íntima exclusiva unica. Traen como resultado alimentos putrefactos de vida muerta en él matrimonio. Desilusión, frustración, hogares rotos, manchados por él pecado y él desasosiego. Aunque pinte un cuadro lúgubre y desalentador, decirte amigo amiga, que él dolor que causa la ruptura de la santidad en él matrimonio, aún no la he podido calificar. Dios lo ha denominado de la siguiente manera: La paga del pecado es muerte.